Desarrollar videojuegos para ordenadores, consolas y dispositivos móviles como teléfonos inteligentes (smartphones) y tabletas (tablets) con los sistemas operativos más extendidos en el mercado. Modelar, texturizar, iluminar y animar objetos y personajes, así como programar las acciones y lógica del juego, hasta conseguir un videojuego completo, pudiendo ser publicado con el fin de obtener rentabilidad económica por su explotación.